Utilizamos cookies propias y de terceros para mejorar nuestros servicios. Si continua navegando, consideramos que acepta su uso.
Puede obtener más información, en nuestra Política de Cookies.

Obituario

"A nuestro compañero y amigo Carlos Lázaro"

"Todo lo que podemos decir de él nos sabe a poco, siempre nos quedaríamos cortos"

El pasado día 8 de octubre amanecíamos con la triste noticia del fallecimiento de nuestro querido compañero y amigo Carlos Lázaro.

Una gran persona, no es un tópico, alegre, servicial, trabajador... Todo lo que podamos decir de él nos sabe a poco y siempre nos quedaríamos cortos. Especialmente ha sido un pilar fundamental en nuestra agrupación, el Coro Ronda las Fuentes, tu Ronda Las Fuentes.

Tu pasión por tu ronda y por todas sus actuaciones, la vivías y la disfrutabas sin límites y así nos lo transmitías a todos y cada uno de nosotros.

Inmediatamente, nada más recibir la triste noticia, se puso en marcha nuestra entera disposición para acompañarte, tanto a ti como a tu familia y amigos, en lo que, sin duda alguna, sería nuestra separación momentánea.

Como no podía ser de otra forma, una corona de tu Ronda Las Fuentes engalanaría tu féretro y a pesar de lo rotos que nos dejaba el fatal desenlace, en nuestras miradas, nuestras conversaciones, llamadas y mensajes, iba emplícito nuestro homenaje a ti en forma de canción. Nuestro deber y deseo, a pesar de la dureza del momento, pasaba por cantar en tu honor por última vez en tu presencia.

Con el beneplácito y deseo de tu familia, con quien consensuamos nuestra intención de cantarte en tu funeral, decidimos con entereza y valentía ofrecerte ese merecido homenaje, de lo cual estamos seguros que estarías orgulloso y seguramente, conociéndote, eternamente agradecido.

Nuestra ilusión y esfuerzo por llevarlo a cabo, se ve truncada, por causas ajenas a nosotros y a tu familia, por la decisión de manera unilateral de la persona que iba a oficiar tu ceremonia, que no nos permite homenajearte como mereces, argumentando que no quiere hacer distinciones y que no haya diferencias entre unos difuntos y otros ni entre sus familias, por lo que no nos permitiría cantar tu misa de despedida, como otras tantas misas que habíamos amenizado y en las que tú, de forma magistral, nos dirigias.

Estamos seguros que tú, así lo habrías querido.

Nuestro asombro e impotencia fueron mayúsculos y no podíamos entender, qué mal se pude estar haciendo al cantar una misa a un compañero de agrupación que nos deja. Algo excepcional y puntual, que habitualmente no ocurre, pero cuando es así y se quiere hacer, a nadie le debería parecer mal y menos con el expreso deseo de la familia y de nuestra parte, tus propios compañeros.

A nuestra perplejidad y estupefacción se ha añadido la de tu familia y la de todos tus amigos y amigas que te han querido acompañar en tu funeral, cuando en el trascurso de la celebración, no aparecía nuestra intervención en forma de canción.

Pero nuestro empeño ha sido tozudo hasta última hora y fruto de la infinidad de argumentos, fundados de razones, que proponemos para cantar la celebración, sin recibir por su parte ningún otro que el descrito anteriormente, accedió a que entonásemos únicamente el Padre Nuestro y un canto de comunión.

Esto nos ha dejado un sabor agridulce, seguro que a ti también, y a tu familia y amigos, mucho más a sabiendas, verdad Carlos, que interpretamos un Aleluya a cuatro voces, que deleita y agrada a cualquier feligrés y un Santo polifónico que abre los oídos y la atención de cualquiera, por no mentar el "Este pan y vino Señor" como canto de ofertorio también a cuatro voces.

Estos cantos fueron entonados en tu misa, Carlos, sin que se nos permitiera a nosotros hacerlo en tu honor, para lo cual hubiéramos dado el todo y a buen seguro habrías sacado esa tu sonrisa enternecedora de satisfacción y orgullo por una actuación más, bien ejecutada por tu Ronda.

Pero, ya sabes como somos, al mal tiempo buena cara. Ha sido un honor acompañarte y en cada nota que tu Ronda las Fuentes entone de aquí en adelante, estarás siempre presente cantando con nosotros.

Hasta luego querido Carlos.

Tu Ronda Las Fuentes.