El Obispado de Santander ha dado luz verde a la fase diocesana del proceso de canonización de los mártires de la persecución religiosa que tuvo lugar entre el 2 de agosto de 1936 y el 22 de agosto de 1937 en Cantabria. La apertura del proceso tuvo lugar el 3 de diciembre de 2016. En estos dos años largos, y en su proceso desde el año 2005, se han ido reuniendo los datos, escritos y epopeyas martiriales de los protagonistas, además de los testimonios de quienes conocieron los hechos y de quienes con posterioridad han podido aportar datos verídicos. Su número se eleva a 79. De ellos, 67 son sacerdotes diocesanos, 3 carmelitas, 3 seminaristas y 6 seglares.
Entre los 79 cnadidatos a ser canonizados como mártires se encuentran 12 sacerdotes campurrianos. La lista está encabeza por el que fue párroco de Matamorosa, Félix Sainz López. Este sacerdote nació en Monegro, Campoo de Yuso y se ordenó en 1926, muriendo a la puerta de su casa, diez años más tarde. También de este municipio y natural de Servillas es Isidoro Gutiérrez González, que fue párroco de Bustamante. De Reinosa, capital de la Merindad son tres los sacerdotes incluidos en este proceso de canonización: Eloy Sedano Hoyos, Manuel Macho Iturbe y Ángel García Mantilla, que fue Coadjuntor de Reinosa.
Los siguientes son de la Hermandad de Campoo de Suso; Antonio Fernández Olea, natural de Argüeso y, Santos Carrera Pereda, natural de Soto, que fue párroco de Reinosa. Del municipio de Valdeolea están en la lista, Benedicto Fernández Calderón, natural de Camesa y Coadjutor de Los Carabeos y, Gregorio Blanco Varona, natural de Cuena, y fue párroco de Los Carabeos. De Valdeprado del Río está Graciano Pérez González, nacido en Malataja y que fue párroco de Mataporquera. Junto a estos sacerdotes y, por último, se encuentran Bernardino Hoyos Bustamante de Somballe, localidad de Santiurde de Reinosa, que fue párroco de Caviedes y, José Gutiérrez Huerta, natural de Fresno del Río, Campoo de Enmedio. Se ordenó sacerdote en 1924 y fue capellán castrense, muriendo en Barriopalacio de Anievas en octubre de 1936.